domingo, 11 de mayo de 2008

La Dicha del Jubilado

LA DICHA DEL JUBILADO.
Tema éste, que no parece en principio prestarse a controversia.
Veámoslo aunque así sea: Ese momento que llega después de haberlo esperado impacientemente, parece ofrecer ni más ni menos que TIEMPO LIBRE para descansar, leer, pasear, hacer deporte y poner a nuestro alcance hobbies varios a cual más apetitosos y dispares. Tantos como diferentes personalidades existen.
Yo le digo a esto. NO, simplemente no! No se equivoque! Cual arma afilada que cualquiera puede esgrimir, pero que será utilizada preferentemente por sus vástagos y como premisa a cualquier petición, saldrá a relucir la frase: Tú, que no tienes nada que hacer..... Y seguirá después alguna petición que le impedirá descansar, leer y todo lo anteriormente enumerado como apetitoso para Vd.
Se sumará a todo esto el tiempo que Vd. tendrá que dedicar a las múltiples "cacas" que le acosarán, ahora que tiene tiempo para ir al médico. Ejemplo: cataratas, reumas varios (usados en masculino, e incluso en femenino, véase "la reuma") y otros achaques múltiples y variados. Considerando, sin embargo, más penoso el primer punto de esta disertación (aparecido en el párrafo anterior)
No olvidemos otro punto: los viajes, que se realizan caiga quien caiga, incluso si hay que pasar por encima de algún cadáver. Así pues. LA JUBILACIÓN ES DURÍSIMA. No lo dude. Sin embargo obstínese Vd. en llegar a ella. Además de lo anteriormente reseñado la jubilación es grande, genial y! MERECE LA PENA! Enhorabuena si la ha alcanzado o está Vd. a punto de ello. ANGELA MAGAÑA

1 comentario:

  1. Ángela: muy acertada la definición que haces de la jubilación, me gusta lo que escribes. Maruja

    ResponderEliminar

Me gusta que me sigáis
, así es que gracias por vuestros comentarios amigos.